Si admiré un vehículo en mi niñez, fue aquella Studebaker color gris, modelo 2R5, de 1949 en la cual aprendí a manejar sentado en las rodillas de mi padre, de la cual también conservo el folleto original. Fue una de las dos primeras que llegaron a Osorno, el mismo año en el cual yo comenzaba mis estudios en el Instituto Alemán de esta ciudad. Es la camioneta que ven en la fotografía, comenta don Bernardo Eggers del Museo del Automóvil Moncopulli - Osorno.
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